Cálida y salvaje, dos atributos perfectos para una de las guitarras que mas mimos se han llevado de las manos de todos los que la han hecho realidad. Los no tan crípticos mensajes grabados en el cobre cuentan mucho de su historia, de su carácter, reflejando el espíritu del proyecto.
En cuanto a su tacto y sonido no hay mucho que decir, otro acabado espectacular de nuestro maestro de la laca con un satinado suave que conjuga a la perfección con el relic de la guitarra. Su sonido no desmerece a su acabado, vibrante y potente, pese a sus humildes componentes.
Una de esas que enamoran... en código binario.